Y llegó la navidad

Ya está aquí la tan esperada época de fiestas….
Llegaron esos días llenos de familia, de reuniones, de actividades, de regalos y también de gastos.
Es una época que nos trae una mezcla de emociones y sentimientos que pueden ir de un extremo a otro. Sentimos la alegría de reconectar y de compartir en familia y con amigos. Sentimos la tristeza de ver como otro año pasó, la prisa por comprar regalos, el estrés de gastar mucho dinero, las ganas de compartir con todos pero a la vez la necesidad de una pausa y de un espacio a solas…. Esta época es todo un reto personal el cómo poder gestionar de la mejor manera posible todo lo que nos viene encima.
Estos días podemos aprovecharlos para llenarnos de amor y repartir este amor… es la excusa perfecta para poder decirles a nuestros seres queridos lo mucho que los apreciamos. A veces nos cuesta hacerlo a lo largo del año, entonces ¿qué mejor excusa que hacerlo en la época navideña? Aprovecha estas fechas para decir esas palabras que no te atrevías en otro momento y para dar ese detalle que tenías pendiente.
Cuando te sientas agobiado o estresado, recuerda darte una pausa, respirar profundo y organizarte por prioridades. Puedes coger papel y lápiz y escribir lo que te queda pendiente en estos días y planear por orden lo que debes hacer. Esto te ayudará a dejar el “tengo que” y transformarlo en acción. Te sentirás bien de ir cumpliendo objetivos y dejarás de procrastinar y llenarte de estrés y de ansiedad por no acabar nada. Y así, al estar más tranquil@ te sentirás mejor con los que te rodean y estarás list@ para disfrutar el momento.
Y, recuerda, un regalo no necesariamente es una cosa comprada, puede ser una carta, una flor, un dibujo, un abrazo. La idea es compartir con amor y ser capaces de disfrutarlo a nuestra manera. No te exijas ser o dar lo que los demás esperan. Sé tu mismo y entrega todo desde tu corazón. Que el dinero no sea una razón de estrés en esta linda época.
¡Felices fiestas!
Un abrazo infinito, Daniela.